Vol 2. • Act XXXI -31- •「Overgrowth Level」

ACTO XXXI: DIOS
<Acto número 31, volumen número 2>

-AVISO-
Este capítulo incluye descripción GORE, si eres sensible por favor sáltate esa parte.

Un tétrico "gujuju.." salía de los labios del Rey demonio. Todos en el acto se detuvieron y, si la masacre no les había parecido suficientemente grotesca, aquél hombre que tenían ante él les había jurado una aún mayor.

Los hombres y mujeres de las jaulas aún estaban inconscientes debido a la [Presión] que Yun había liberado antes con su título de [Héroe] activo así que no corría riesgo de que nadie hubiera visto aquella transformación. Aunque ahora mismo no era consciente de sus acciones y mucho menos de todo lo que iba a suceder.

― Juguemos...... ¿Sí?

Yun pateó el suelo y una pequeña onda expansiva salió disparada en forma circular hacia todas las direcciones como cuando lanzas una piedra a un lago. Cuando la onda parecía haber desaparecido, la tierra empezó a rasgarse y un montón de picos afilados de hueso salían rompiendo el terreno abruptamente cerrando en una forma esférica el campamento.

A pesar de que habían bandidos pálidos e inmóviles, otros no perdían la esperanza y continuaban lanzando flechas envenenadas, virotes y lanzas hacia el aprendiz de rey demonio que ignoraba todos los proyectiles. Sus ojos se fijaron en un pequeño vándalo que lanzaba jabalinas hacia su dirección.

Con un chasqueo de dedos, una lanza de hueso salió del terreno y empaló al joven entrando por sus lugares más nobles y saliendo por la la parte superior de la cabeza. Un montón de ruidos desagradables sonaban del interior del joven bandido ahora convertido en un espantapájaros sanguinolento de carne y vísceras.

― ¡M-MONSTRUO! ¡¡HUID!!

― ¡¿Huir?! ¡Pero si acabamos de empezar! - dijo con un tono alegre el joven Rey demonio que ahora corría ligeramente hacia el centro del campamento lleno de restos humanos.

Sus largas uñas negras relucían con fuerza mientras todos iban retrocediendo buscando una brecha en a su alrededor: no había escapatoria, todo el terreno había sido sellado de forma circular por aquél material blanquecino tan duro como el mismo metal que rodeaba el campo de batalla.

Un zarpazo al aire hizo que un montón de cuchillas parecidas a las [Hojas aéreas] pero con un aura rojiza en vez de azul salieran disparadas hacia la dirección de uno de los bandidos. Las hojas aéreas de color carmesí volaron y rozaron la cara de uno de los enemigos, haciendo que ésta se desprendiera dejando en carne viva al pobre hombre.

― ¡¡¡¡AHHHHHHHHHhhh.....!!!!

― Ese sonido... ¡Haa..!

Un rostro de satisfacción cruzaba el rostro de Yun que corrió ahora a una velocidad pasmosa y terminó con su vida aplastándole la tráquea con sus propias manos de una forma seca y rápida.

El bandido que a su lado estaba aterrorizado con espada en mano lanzó un ataque hacia Yun que le golpeó con éxito, pero no le infligió ningún tipo de daño. El aprendiz se giró para mirar fijamente al hombre el cual, del terror, dejó sus esfínteres libres dejando el dorado líquido caer de sus partes delanteras.

Una sonrisa con un millar de dientes afilados apareció en el rostro de Yun. Tanto la cola como aquellos dientes no aparecían cuando se transformaba de forma casual. Una mano gentil aterrizó en el hombro del bandido y una voz relajante le susurró algo.

― Tú vas a pelear contra tu compañero. Si lo matas, tendré compasión.

Los otros bandidos alcanzaron a oír eso y rápidamente decidieron colaborar. La mano acarició el pelo marrón del bandido y un "buen chico" hizo que el ambiente tétrico ganara aún un peor aspecto pesadillesco.

― Tú, pelea con él.

Un "¡s-s-sí....!!" acompañó a la oración como respuesta y el hombre se agachó para recoger el arma.

― No dije que podíais usar armas.

― P-pe-pero...

― Quiero que os matéis a mordiscos, como las hienas sarnosas que sois.

El hombre empalideció aún más y la sola idea hizo que una sensación de arcadas le invadiera. Yun, al esperar unos segundos y ver que aquél hombre no iba a obedecer suspiró. Su mano llena de garras pasó por su estómago y le infligió una herida superficial, pero lo suficientemente profunda como para que las tripas empezaran a caer por el efecto de la gravedad.

― ¡¡¡¡Ahhhhhhhhh!!!!!

Todos tragaban saliva y muchos otros vomitaron ante el espectáculo. Yun sujetó un extremo de los intestinos y apretó de él con fuerza gritando cosas como "¡buen lobo sarnoso! ¡¿no es esta correa algo digno de tu persona?!".

Todos, previendo lo que les podía ocurrir, dejaron sus armas y empezaron a atacarse usando únicamente los dientes y las manos para noquear al objetivo.

El resultado fue una masacre digna de una escena caníbal que entraría dentro de las pesadillas más oscuras de un ser de otro mundo. Los pocos que no tenían fragmentos de carne en sus labios tenían faltas de tendones o incluso falta de algún órgano por las peleas entre ellos. Los pocos supervivientes apenas podían moverse tras aquello y sonreían débilmente hacia Yun.

― H-h-hemo.... hemos cumplido...

Yun asintió complacido y alzó su mano clavándole las garras dentro de las cuencas oculares a uno de los tres supervivientes de la masacre cayendo muerto al instante. Los otros dos gritaron cosas como "¡hemos cumplido, perdónanos la vida...!".

Yun entonces sonrió ampliamente y susurró algo que heló la sangre a los jóvenes.

― Dije que tendría compasión. En vuestro estado, la compasión es que sufráis lo menos posible. ¿Quién querría una vida con semejante deformidad ahora?

A uno de ellos le puso el pie en la cara y aumentó poco a poco la presión mientras el pobre bandido notaba como los huesos del cráneo se rasgaban y la sangre entraba por todos los lugares de su rostro. Finalmente, aplastó la cabeza del hombre haciendo saltar trozos de cerebro, cartílagos y hueso por los alrededores con un terrible *CHOF*.

El otro bandido ahora reía sádicamente, se había rendido y reía con fuerza mientras lágrimas caían sin parar.

― ¡¿Qué eres?!

Un *SHHH* acompañado de una ligera caricia al pelo del último bandido tendido tranquilizaron el ambiente. La respuesta vino tras un ruido espantoso producido por haber clavado las afiladas garras dentro del cerebro del hombre lentamente.

― Dios.

Sentenció mientras sacaba las ahora ensangrentadas uñas del cráneo de su víctima.

Todos los alrededores ahora estaban silenciosos, los muros de hueso empezaron a descender lentamente pero los agujeros del terreno se mantenían siendo de aproximadamente 30 centímetros de diámetro. Yun buscó por todos lados más víctimas, su sed de sangre no podía aplacarse únicamente con eso.

Sus ojos divagaron por la zona y encontraron las jaulas. Él sabía que no debía, pero ¿por qué no? Se acercó caminando a los inconscientes esclavos y esclavas con una sonrisa tranquila en el rostro. Con las uñas, fue acariciando barrote tras barrote al sonido de *CLANG CLANG CLANG* mientras decidía qué hacer.

Su cola se movió audaz y agarró los barrotes que lanzaban pequeñas chispas púrpuras rechazando el contacto. Yun lo ignoró y con un ligero tirón arrancó los barrotes como si fueran papeles.

― Haaaaa... ¿Qué tenemos aqu-?

Un fuerte dolor en el pecho empezó a atacarle. Al principio solo fue una molestia, después empezó a volverse un dolor y ahora era casi algo insoportable que parecía ser insoportable. Un grito desgarrado rompió el silencio nuevamente y sus manos se dirigieron al estómago y el abdomen presuntamente.

― ¡¿Qu-?!

No podía quitarse la armadura ya que iba ligada a su voluntad, así que usando algo de su conciencia hizo que la parte de la armadura donde tenía los dolores empezara a volverse translúcida. Pudo ver dos marcas de agujeros bien hondas además de un buen charco de sangre que corría hacia abajo.

[Vínculo vital] había funcionado de una forma distinta a como él esperaba. No había 'curado' a nada ni a nadie, mientras que con bestias absorbía su fuente de energía vital y traspasaba las heridas a su oponente, cuando se usaba con fines curativos hacía el efecto contrario y cambiaba las heridas de ubicación.

En su mente, la retina empezó a lanzar efectos.

[Efecto negativo añadido: Desangrado × 4]

[Efecto negativo añadido: Veneno de acción rápida × 2]

[Efecto negativo añadido: Escasez de maná (media)]

[Efecto positivo removido: Furia del titán Shell]

[Has obtenido una habilidad: Resistencia a estado anormal (veneno de acción rápida)]

[Has obtenido una habilidad: Púas óseas]

[Has obtenido una habilidad: Gólem cárnico]

― ¡¿Qu-qué estupidez es... esta?!

Unas partículas azules fueron desvaneciendo la armadura de cuerpo completo del [Rey Demonio] y rehaciendo la del [Héroe], como si nunca hubiera sucedido. Su título volvió a activarse mientras Yun jadeaba por aire.

El dolor pronto fue tan punzante que obligó al joven a sentarse apoyándose en una de las jaulas, precisamente en la que había abierto hace unos segundos y se tocó el estómago. Su regeneración en unos minutos le curaría por completo, pero por el momento tenía que descansar.

Solo un minuto después, una figura caminaba con una daga hacia él. Conocía esa figura. Esas orejas, esa cola... La recepcionista se acercaba cojeando ligeramente hacia su posición mirándole fijamente.

• • •

[MOKU]

Me duele... Noto el frío hedor de la muerte susurrándome palabras obscenas y guiándome a las profundidades del abismo. Mi cuerpo se enfría y lloro sin poder evitarlo. Papá, mamá, hermano, os echaré de menos.

Mis ojos borrosos solo pueden discernir la figura de aquél hombre de latón que ahora recibe los impactos por mí. Intenté detenerle forzándole, pero parece que fue una mala idea... ¿Por qué la gente no puede cambiar...? Al final, ¿esto es lo que pasará conmigo? Mi boca solo suelta un líquido de sabor metálico. Quiero hablar, quiero decir tantas cosas en tan poco tiempo que parece imposible.

Mi tiempo se escapa, mis brazos están fríos, noto sus manos a través de la armadura apretando mi herida. Lo siento, idiota-san, pero eso no funcionará. Es curioso, no le conozco tanto como para pensar que es buena persona, pero ahora mismo transmite una sensación de confianza, de alguien confiable.

....Me pregunto si la persona que Emi perdió tenía esa misma aura.

Seguro que fue una gran persona. Parece que la conoceré pronto. No quiero morir..... no quiero..... pero..... extrañamente, estoy tan calmada.....

Sus manos siguen apretando mi herida. Mis labios por fin pronuncian palabras.

― ¿V-vo-voy a mo-morir?

No quiero oír respuesta, no quiero pensar en ello.....

El hombre de lustrosa armadura sigue apretando mi herida, como si quisiera evitar que la muerte hiciera su trabajo. Estoy feliz por pensar que incluso un monstruo como él es capaz de sentir compasión por otros. Quizás.... ¿no es un monstruo....?

Hah.... Me di cuenta tarde....

― S-señor Hiro-sama, qu-quiero disculpa-... parme por todo...

Sí, eso es. Intento levantar la mano, pero ya no noto reacción en ella y sé que mi inminente final está cerca. Mi visión empieza a nublarse, mis ojos pesan y tengo.... frío....

El hombre hace un ruido, parece que.... habló.... haha.... me habló.... a mí..... su voz es tan dulce y confiable.... Muevo mis dedos intentando centrar mi mente en algo para no caer en el profundo sueño que pulsa mis sentidos.....

Pero al final....

Mis ojos se cierran lentamente. No soy capaz de luchar más, lo único que soy capaz de exhalar con mi último aliento.

― A-al final, no soy di-diferente de la gente de la que... me quejo...

Sí, eso es. Siempre he estado juzgando a la gente por cómo me juzgaban a mí pensando que si el mundo te odiaba era normal que le devolvieras la moneda. Ahora veo mi error, así que hay gente como él, silenciosa y extraña, caminando entre mundos siendo odiado, siendo despreciado a cambio de seguir maldito, por y para siempre...

Lamento todo esto.... Si tuviera una segunda oportunidad, me habría gustado ser su amiga....

Supongo que no pasará.....

La voz confiable me dice algo, estoy demasiado lejos para oírla. Mis dedos se detienen y mi cuerpo deja de funcionar. Noto algo en mí, como si mi herida cada vez doliera menos, así que solo puedo intuir que la muerte ya está abrazándome.

Mis sentidos caen en un profundo silencio.

...

Veo un lugar lleno de colores, un montón de figuras sin sentido que bailan al compás de una música imaginaria. Veo ruidos como si fueran imágenes y puedo oír los sabores. Mi mundo se ha confundido, es algo que no soy capaz de explicar.

Me veo tumbada en un paisaje totalmente oscuro cuando las figuras de colores desaparecen. El suelo parece reaccionar a mi tacto creando pequeñas ondas que saltan. Es bastante lindo.

Me levanto y camino en la eternidad de la absoluta nada. Para siempre, por siempre. ¿A dónde ir? No lo sé, ¿qué hacer? tampoco tengo ni la más mínima idea.

Paso algunos minutos rodando en soledad, sin ningún objetivo en concreto. Mi mente está extrañamente calmada.

Algo me empieza a pinchar en el estómago. Bajo mi mirada y veo que las heridas en mi cuerpo desaparecen. Un hermoso hilo verde parece coser la herida dejando piel cicatrizada en su lugar, ¿será que la muerte es un mundo donde todo lo controlas tú?

¡¡Ah!!

Eso dolió. Noto como si hubiera recibido un puñetazo en el pecho y me arde la herida.

¡¡¡Hey!!!

Otro más, ¿qué está pasando-?

Toso, toso con mucha fuerza. Noto aire frío entrando en mis pulmones. Espera, ¿aire? ¿Qu-?

Noto frío ahora y puedo discernir a pocos metros voces, parecen voces pidiendo perdón por algo. No puedo entender bien lo que dicen. Mis ojos siguen pesados, pero... ¿Será que----?

...

Mi cuerpo convulsiona agresivamente mientras ese magnífico hilo verde que estaba en mi cuerpo empieza a volverse partículas y desaparecer. Abro mis ojos de golpe y noto como la claridad del día toca mis ojos....

Ha.... E-estoy....

Haha...............

Noto mis movimientos, mis sentidos reaccionan... Estoy...... ¿...viva? Mis ojos aún borrosos ven al caballero de latón a lo lejos rodeado de unas partículas azules. Me levanto con mucha dificultad apoyándome de una de las dagas que traía. No veo indicios de más bandidos, no quiero pensar cómo ha sucedido todo, el campo de batalla me produce arcadas..

Camino cojeando hacia el caballero de latón y veo de cae redondo apoyándose en una jaula. Intento darme más prisa mientras poco a poco recupero la normalidad hasta que veo que mis ojos divagan involuntariamente hacia su mano.

Está tocándose el estómago.... Parece haber sido herido en combate....

Corro con más rapidez y llego a escasos metros. Su casco mira hacia mi dirección y yo le devuelvo la mirada.

Nos pasamos unos segundos así, silenciosos, mirándonos el uno al otro.

Mi estómago se cruza y me cuesta encontrar palabras. El hombre de latón cesa en mantener la mirada y baja la cabeza.... ¡Oye! ¡No irás a morir, ¿verdad?! ¡Hey!

¡¡Oye!!

Sus ojos se cierran lentamente. ¡Oye, levántate! Sin darme cuenta empiezo a zarandear con fuerza la armadura del hombre de latón dejando la daga a un lado.

Sigo intentándolo con todas mis fuerzas.

No quiero más muertes. Por hoy es suficiente.

Vuelve en ti, ¡vuelve! ¡¿no eras inmortal?! ¡Oye! ¡¡Oye!! Me sorprendo a mí misma zarandeando a un hombre mientras unas pequeñas gotas de agua caen rostro abajo, ¿por qué...?

No soy capaz de entenderlo...

La mano del hombre agarra mi muñeca, mi pecho da un pequeño sobresalto y un suspiro de su parte me indica que está vivo.

Maldita sea, no me asustes más así...

Haha......